domingo, 16 de diciembre de 2007

El gobierno del PSOE pretende culminar la implantación del EEES.

...por Antonio Chacón

El gobierno del PSOE avanza en la profundización del proceso de Bolonia y en la aplicación de la LOU, intentando completar la incorporación de la enseñanza universitaria al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES).

La mercantilización de la enseñanza

Las actuales reformas universitarias se basan en la Declaración de Bolonia, que marca “el objetivo de mejorar la competitividad del sistema de enseñanza superior europeo” y que parte del Acuerdo General sobre el Comercio de Servicios (AGCS) elaborado por la Organización Mundial del Comercio. Este acuerdo tiene por objetivo la “completa liberalización del mercado de servicios” e incluye el “comercio de servicios educativos”, con lo que la enseñanza deja de considerarse como un derecho básico y pasa a ser una mercancía que funciona según las reglas del mercado y del libre comercio. Las subvenciones públicas, que pueden considerarse como competencia desleal, se califican como “efectos distorsionadores en el comercio de servicios”, por lo que se restringen y se rigen por criterios exclusivamente competitivos.

A pesar de que la Declaración de Bolonia establece un marco europeo, la UE no tiene competencia en materia de enseñanza universitaria, por lo que no puede establecer normas obligatorias que afecten a la educación superior. Por lo tanto, para implantar el EEES es necesario que cada Estado establezca sus propias leyes. En el Estado español las directrices de Bolonia se establecen a través de la Ley Orgánica de Universidades (LOU) que aprobó Aznar y que Zapatero va profundizando a través de reales decretos.

Privatización

La LOU le abre las puertas de la universidad pública a las grandes empresas, que pasan a estar físicamente representadas en los órganos de dirección de la universidad, donde se deciden los planes de estudio e investigación –Consejo Social y Consejo de Gobierno- y en organismos externos como la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA), que cumple un papel determinante. Así la universidad se convierte en un enorme laboratorio de investigación para las multinacionales, en una gran plataforma para la inversión privada y la obtención de suculentos beneficios; y en un centro de formación de mano de obra cualificada para las necesidades del mercado. La LOU representa una privatización encubierta y la pérdida de la autonomía universitaria (hiriendo de muerte a la libertad de cátedra).

Elitización

Los últimos reales decretos aprobados para profundizar la implantación de la LOU avanzan en la elitización de la enseñanza universitaria, imposibilitándoles el acceso a los trabajadores e hijos de familias trabajadoras. Mediante la aplicación de los eurocréditos –ECTS- (que triplican las horas de los anteriores créditos) se aumenta el precio de las matrículas y se exige dedicación a tiempo completo, con importantes incrementos en el volumen de trabajo por cuenta del estudiante (horas que también se pagan). A través de la división en Grado-Máster-Doctorado se reserva la formación cualificada a quien pueda costearse un Postgrado. De esta forma el acceso a la universidad pasa a restringirse enormemente, más aún teniendo en cuenta que además se endurecen los filtros y pruebas de admisión y se eliminan las actuales becas –sustituyéndose por “becas-préstamo” (que no son más que créditos bancarios).

Degradación de la calidad de enseñanza

El organismo creado por la LOU para garantizar la fiscalización de universidades, titulaciones y personal docente e investigador, es la ANECA. Esta agencia tiene como objetivo promover la competitividad y elaborar un ranking de universidades, para así orientar la inversión empresarial hacia las que mejor garanticen sus intereses. Habrá por lo tanto universidades de primera y de segunda clase, compitiendo continuamente por ser más rentables y conseguir financiación. Un gran número de universidades y titulaciones desaparecerán por no ser rentables y no atraer inversión privada. Además, como una dificultad añadida para la universidad pública, la LOU la equipara a la privada ante la ANECA. El hecho de poner a la universidad al servicio de las leyes del mercado y no de los intereses de la sociedad, y que la lógica del máximo beneficio desplace al pensamiento crítico-científico, representa un considerable deterioro de la calidad de la enseñanza y un cambio radical en el modelo de estudios superiores.

Precarización del personal

La privatización lleva incorporada la precarización de los trabajadores de la universidad (profesores, investigadores, becarios y PAS). La LOU convierte a la universidad en una gran ETT, admitiendo hasta un 49% de profesores e investigadores con contratos eventuales y donde va sustituyendo al funcionariado por becarios. Además, esta precarización disminuye irremediablemente la calidad de los servicios prestados.

www.marxismo.info

Arriba, pensar el blanco. La geografía y el calendario de la teoría (I)

...por Subcomandante Marcos

En los últimos años ha cobrado fuerza, en el medio intelectual progresista de México, la idea de que se puede transformar las relaciones sociales sin luchar y sin tocar los privilegios de que disfrutan los poderosos. Sólo es necesario tachar una boleta electoral y ¡zaz!, el país se transforma

Ponencia en la conferencia colectiva que se llevó a cabo el día 13 de diciembre a las 9:00 a.m. correspondiente al “Primer Coloquio Internacional In Memoriam Andrés Aubry”.

Ni el Centro ni la Periferia

“El problema con la realidad, es que no sabe nada de teoría”
Don Durito de La Lacandona.

Elías Contreras, Comisión de Investigación del EZLN, decía que la lucha, la nuestra al menos, podía ser explicada como una lucha de geografías y calendarios. Ignoro si este compañero, uno más de los muertos que de por sí somos, imaginó siquiera que sus teorías (“sus pensamientos”, decía él) serían presentadas al lado de tantas luces intelectuales como las que ahora confluyen en el suroriental estado mexicano de Chiapas. Tampoco sé si hubiera autorizado que yo, un subcomandante cualquiera, tomara algunos de esos pensamientos y los expusiera públicamente.

Pero, tomando en cuenta la evidencia de nuestro bajo “rating” mediático y teórico, creo que puedo permitirme el tratar de exponer las bases rudimentales de esta teoría, tan otra que es práctica.

No voy a aburrirlos contándoles el embrollo sentimental de Elías Contreras que, como todos y todas las zapatistas, eligió amar con desafío. Como si el puente afectivo que se tiende hacia la otra, el otro o lo otro no fuera ya de por sí complejo y complicado, Elías Contreras todavía le agregó las distancias y muros que separan los calendarios y las geografías, además del conocimiento, es decir el respeto, de la existencia de lo otro. Como si de esa forma él (y con él, lo colectivo que somos) decidiera hacer todo lo posible para que un acto tan antiguo, común y cotidiano como la existencia del ser humano, se convirtiera en algo extraordinario, terrible, maravilloso.

En cambio, en lugar de contarles del complicado e inquebrantable puente del amor de Elías Contreras por la Magdalena (que no era ni hombre ni mujer, lo que ya de por sí es un desafío a la lucha de género), pensé entonces en traerles algo de la música que se toca en las comunidades zapatistas. Por ejemplo, apenas anoche escuché una música que el “maistro de la ceremoña” tipificó como ritmo “corrido-cumbia-ranchera-norteña”. ¿Qué tal? Ritmo corrido-cumbia-ranchera-norteña… si eso no es un desafío teórico, entonces no sé que lo sea. Y no me pregunten cómo se toca o se baila eso, porque yo no toco ni la puerta y, además, a mi avanzada edad, en el baile tengo la gracia de un elefante con la uña enterrada.

Hace más de dos años, en estas montañas del sureste mexicano, en ocasión de las reuniones preparatorias de lo que después se llamaría “La Otra Campaña”, una mujer joven dijo, palabras más, palabras menos, “si tu revolución no sabe bailar, no me invites a tu revolución”. Tiempo después, pero entonces en las montañas del noroeste de México, volví a escuchar esas mismas palabras de la boca de un jefe indígena que se esfuerza por mantener vivos los bailes y la cultura toda de nuestros ancestros.

Al escuchar a la una y al otro, en tiempos distintos, yo volteé a mirar a una de las comandantas y le dije: “Ahí le hablan jovena”. La Comandanta no dejó de mirar hacia la concurrencia, pero en voz baja dijo: “Urrr Sup… Uta magre, viera que me dan pista y hasta les dejo planito el suelo”.

Yo no les voy a estar mentirando. La verdad es que pensé que podría traerles algunas historias de Sombra el guerrero, de Elías Contreras y la Magdalena, de las mujeres zapatistas, de las niñas y niños que crecen en una realidad diferente (ojo: no mejor, no peor, sólo diferente) a la de sus padres, marcada por otra resistencia, y hasta les contaría un cuento de la niña llamada “Diciembre” que, como su nombre lo indica, nació en Noviembre. Y pensé también ponerles algunas músicas (sin agraviar a las presentes), pero es de todos conocida la seriedad con la que los zapatistas abordamos los temas teóricos, así que sólo diré que habría que encontrar alguna forma de ligar la teoría con el amor, la música y el baile. Tal vez igual la teoría no alcanzaría a explicar nada que valiera la pena, pero sería más humana, porque la seriedad y el acartonamiento no garantizan el rigor científico.

Pero, bueno, ya me estoy yendo de nuevo por otro lado. Les decía yo que Elías Contreras, Comisión de Investigación del EZLN, decía a su vez que nuestra lucha podía ser entendida y explicada como una lucha de geografías y calendarios.

En nuestra participación como “teloneros” de los pensamientos que en estos días se congregan en este lugar y en estas fechas, serán la geografía y el calendario… más bien, la larga trenza que entre ambos se anuda abajo, uno de los referentes de nuestra palabra.

Dicen nuestros más mayores que los dioses más primeros, los que nacieron el mundo, fueron siete; que siete son los colores: el blanco, el amarillo, el rojo, el verde, el azul, el café y el negro; que son siete los puntos cardinales: el arriba y el abajo, el delante y el detrás, el uno y el otro lado, y el centro; y que siete son también los sentidos: oler, gustar, tocar, ver, oír, pensar y sentir.

Siete serán entonces los hilos de esta larga trenza, siempre inconclusa, del pensamiento zapatista.

Hablemos, pues, de La Geografía y el Calendario de la Teoría. Para esto pensemos el color blanco allá arriba.

***

No tenemos el dato exacto, pero en el complejo calendario del pensamiento teórico de arriba, de sus ciencias, técnicas y herramientas, así como de sus análisis de las realidades, hubo un momento en que las pautas se marcaban desde un centro geográfico y de ahí se iban extendiendo hacia la periferia, como una piedra arrojada en el centro de un estanque.

La piedra conceptual tocaba la superficie de la teoría y se producía una serie de ondas que afectaban y modificaban los distintos quehaceres científicos y técnicos adyacentes. La consistencia del pensamiento analítico y reflexivo hacía, y hace, que esas ondas se mantengan definidas… hasta que una nueva piedra conceptual cae y una nueva serie de ondas cambia la producción teórica. La misma densidad de la producción teórica tal vez podría explicar el por qué las ondas, las más de las veces, no alcanzan a llegar a la orilla, es decir, a la realidad.

“Paradigmas científicos” han llamado algunos a estos conceptos capaces de modificar, renovar y revolucionar el pensamiento teórico.

En esta concepción del quehacer teórico, en esta meta-teoría, se insiste no sólo en la irrelevancia de la realidad, también y sobre todo se alardea que se ha prescindido completamente de ella, en un esfuerzo de aislamiento e higiene que, dicen, merece ser aplaudido.

La imagen del laboratorio aséptico no sólo se limitó a las llamadas “ciencias naturales” o a las “ciencias exactas”, no. En los últimos saltos del sistema mundial capitalista, esta obsesión por la higiene anti-realidad alcanzó a las llamadas “ciencias sociales”. En la comunidad científica mundial empezó entonces a cobrar fuerza la tesis de “si la realidad no se comporta como indica la teoría, peor para la realidad”.

Pero volvamos al plácido estanque de la producción teórica y a la piedra que ha alterado su forma y contenido.

El reconocimiento de esta aparente fragilidad del andamiaje conceptual científico significó aceptar que la producción teórica se renovaba continuamente, incluso dentro de su pretendido aislamiento de la realidad. El laboratorio (término ahora muy usado por los llamados científicos sociales para referirse a las luchas dentro de las sociedades) no podría nunca reunir las condiciones ideales, por más aséptico y esterilizado que estuviera, para garantizar la perpetuidad que toda ley científica reclama. Y es que resulta que en su mismo quehacer, irrumpen una y otra vez nuevos conceptos.

En estas concepciones, la idea (el concepto, en este caso) precede a la materia y se adjudica así a la ciencia y la tecnología la responsabilidad de las grandes transformaciones de la humanidad. Y la idea tiene, según el caso, un productor o un enunciante: el individuo, el científico en este caso.

Desde la ociosa reflexión de Descartes, la teoría de arriba insiste en la primacía de la idea sobre la materia. El “pienso, luego existo” definía también un centro, el YO individual, y a lo otro como una periferia que se veía afectada o no por la percepción de ese YO: afecto, odio, miedo, simpatía, atracción, repulsión. Lo que estaba fuera del alcance de la percepción del YO era, es, inexistente.

Así, el nacimiento de este crimen mundial llamado capitalismo es producto de la máquina de vapor y no del despojo. Y la etapa capitalista de la globalización neoliberal arranca con la aparición de la informática, el internet, el teléfono celular, el mall [centro comercial], la sopa instantánea, el fast food [comida basura]; y no con el inicio de una nueva guerra de conquista en todo el planeta, la IV Guerra Mundial.

En el campo de la tecnología se repite el mismo patrón. Y se agrega que, como el concepto científico, la técnica nace “inocente”, “libre de toda culpa”, “inspirada en el bien de la humanidad”. Einstein no es responsable de la bomba atómica, ni el señor Graham Bell lo es de los fraudes vía celular del hombre más rico del mundo, Carlos Slim. El coronel Sanders no es responsable de las indigestiones provocadas por el Kentucky Fried Chiken, ni el señor MacDonald de las hamburguesas de plástico reciclado.

Esto, que algunos desarrollaron más y definieron como “objetividad científica”, creó la imagen del científico que permea todavía el imaginario popular: un hombre o una mujer despeinados, con lentes, bata blanca, con desaliño corporal y espacial, embebidos frente a probetas y matraces burbujeantes.

El autodenominado “científico social” “compró” esa misma imagen, con algunos cambios: en lugar de laboratorio, un cubículo; en lugar de matraces y probetas, libros y cuadernos; en lugar de blanca, una bata de color oscuro; el mismo desaliño; pero agregaba tabaco, café, brandy o cogñac (también en la ciencia hay niveles, mi buen) y música de fondo, que eran impensables en un laboratorio.

Sin embargo, unos y otros, enfrascados como estaban en su objetividad y asepsia, no advirtieron la aparición y crecimiento de los “comisarios de la ciencia”, es decir, de los filósofos. Estos “jueces” del conocimiento, tan objetivos y neutrales como sus vigilados, expropiaron el criterio de cientificidad. Como la realidad no era el referente para determinar la verdad o falsedad de una teoría, entonces la filosofía pasó a cumplir ese papel. Apareció así la “filosofía de la ciencia”, es decir, la teoría de la teoría, la meta-teoría.

Pero la llamada “ciencia social”, la hija bastarda del conocimiento, encontró a los filósofos con sobrecarga de trabajo o con exigencias difíciles de cumplir (del tipo “Si A es igual a B y B es igual a C, entonces A es igual a C”), así que cada vez más debe padecer a los intelectuales de la academia como censores y comisarios.

***

Mmh… creo que con lo anterior ya demostré que puedo ser tan oscuro e incomprensible como cualquier teórico que se respete, pero estoy seguro de que hay una forma más sencilla de seguir con esto.

Así que ahí les voy, nomás háganse a un ladito, no los vaya yo a salpicar.

En resumen, a consecuencia de este calendario y esta geografía, resulta que allá arriba la producción teórica no es más que una moda que se piensa, ve, huele, gusta, toca, escucha y siente en los espacios de la academia, los laboratorios y los institutos especializados.

O sea que la teoría es una moda que tiene en las tesis (de posgrado, mi buen, también en la academia hay niveles), las conferencias, las revistas especializadas y los libros, los sustitutos de las revistas de moda. Los coloquios suplen el lugar de las exhibiciones de modas, y ahí los ponentes hacen lo mismo que las modelos en la pasarela, es decir, exhiben su anorexia, en este caso, su delgadez intelectual.

Tomad cada momento del surgimiento de uno de esos paradigmas y encontrareis un centro intelectual que se disputa la primicia. Las universidades europeas y los institutos tecnológicos de Norteamérica repiten el listado de la moda: París, Roma, Londres, Nueva York (lo lamento si rompo alguna ilusión, pero no aparecen el Tec de Monterrey, ni la Ibero, ni la UDLA).

Con esto quiero decir que el mundo científico construyó una torre de cristal (pero plomado), con sus propias leyes y adornado con los vitrales churriguerescos que elaboran los intelectuales ad hoc.

A ese mundo, a esa torre y sus pent-houses [áticos], no podrá acceder la realidad hasta que acredite estudios de posgrado y un currículum, presten atención, tan abultado como la billetera.

Así se nos presenta al común de la gente, y así se representa a sí misma la comunidad científica.

Pero una mirada atenta y crítica, una de ésas que tanto escasean ahora, permitiría ver lo que en realidad ocurre.

Si el nuevo paradigma es el mercado y la imagen idílica de la modernidad es el mall o el centro comercial, imaginemos entonces una sucesión de estantes llenos de ideas, o mejor aún, una tienda departamental con teorías para cada ocasión. No costará trabajo entonces imaginar al gran capitalista o al gobernante en turno recorriendo los pasillos, sopesando precios y calidades de los distintos pensamientos, y adquiriendo aquellos que se adapten mejor a sus necesidades.

Allá arriba, toda teoría que se respete debe cumplir una doble función: por un lado: desplazar la responsabilidad de un hecho con una argumentación, que no por elaborada es menos ridícula; y, por el otro, ocultar la realidad (es decir, garantizar la impunidad).

En la explicación de la desgracia aparecen ejemplos:

El señor Calderón (todavía algunos desubicados lo consideran el presidente de México), disfrazado como militar, encuentra en la teoría lunática la explicación de las catástrofes que asolaron Tabasco y Chiapas (como antes a Sonora y Sinaloa) y ordena a sus tropas que le consigan la capacidad de convencimiento que no ha podido construir sobre ese castillo de naipes trucados que fue la elección presidencial del 2006. Su fracaso, tan poco informado en los medios, era previsible: consigue más el Teletón que el Estado Mayor presidencial. Desplazando la responsabilidad a la luna (quien, dicho sea de paso, es rencorosa, como lo contará la leyenda del origen de Sombra, el guerrero –pero eso será, si es que es, otro día-), Calderón oculta su responsabilidad y la de quienes lo antecedieron. Resultado: se crea una comisión para investigar… astronomía, y darle así, además del pobre de las armas, algún sustento legítimo a este émulo de Huerta y amante, según confesión propia, de los juegos cibernéticos militares. Seguramente, si la luna se niega a aceptar su culpabilidad, el titular del IV Reich le dirá, con la mirada dura y decidida: “¡bájate o mando por ti!”.

El señor Héctor Aguilar Camín, el prototipo del intelectual no de arriba (él que más quisiera) sino arribista, reescribe el “Libro Blanco” con que la PGR zedillista quiso explicar, sin éxito alguno, la matanza de Acteal (que este 22 de diciembre cumple 10 años sin verdad ni justicia). Fiel al patrón en turno, Aguilar Camín busca, inútilmente, desviar la indignación que de nuevo se levanta, ocultando un crimen de Estado y desplazando la responsabilidad se los asesinatos… a los muertos.

Felipe Calderón y Héctor Aguilar Camín, uno vestido cómicamente de militar y otro patéticamente disfrazado de intelectual. El primero maldiciendo a quien le recomendó comprar la teoría de la luna, y el segundo recorriendo oficinas gubernamentales y cuarteles militares ofreciendo en venta su inútil detergente para limpiar las manchas de sangre.

Es ésta, la teoría blanca e impoluta de arriba, la que domina en el decadente mundo científico. Frente a cada uno de sus estallidos teóricos, también llamados pomposamente “revoluciones científicas”, el pensamiento progresista en general se ha visto obligado a remar a contracorriente. Con el par de remos de la crítica y la honestidad, los pensadores (o teóricos, aunque es común usar este término como descalificativo) de izquierda deben cuestionar el alud de evidencias que, con el disfraz de la cientificidad, sepultan la realidad.

El referente de este quehacer crítico es la ciencia social. Pero si ésta se limita a expresar deseos, juicios, condenas y recetas (como ahora hacen algunos teóricos de la izquierda en México), en lugar de tratar de entender para tratar de explicar, su producción teórica no sólo resulta incapaz, sino, las más de la veces, patética.

Es entonces cuando la distancia entre teoría y realidad no sólo se convierte en un abismo, también presenta el triste espectáculo de autodenominados científicos sociales arrojándose con singular alegría al vacío conceptual.

Tal vez alguno, alguna, de quienes nos escuchan o leen, conozcan esos comerciales que anuncian productos para adelgazar sin hacer ejercicio y atascándose de garnachas y comida rica en “hidrocarburos”. Sé que es poco probable que alguien de aquí sepa de ello, pues estoy seguro de que se encuentran inmersos en cuestiones realmente importantes de la teoría, así que permitan que les dé un ejemplo: hay un anuncio de una galleta que si se come, a ellas les puede dar la figura de Angelina Jolie (suspiro), y ellos pueden llegar a tener el cuerpo atlético del SupMarcos (¡arrrrrroz con leche!)… ¡un momento! ¿yo escribí eso que acabo de decir? Mmh… no, no lo creo, mi modestia es legendaria, así que borren esa parte de sus apuntes. ¿En qué estaba? ¡Ah sí!, en la galleta que les dará una figura espectacular y eso sin hacer más ejercicio que el de llevar el producto a la boca y masticarlo.

De la misma forma, en los últimos años ha cobrado fuerza, en el medio intelectual progresista de México, la idea de que se puede transformar las relaciones sociales sin luchar y sin tocar los privilegios de que disfrutan los poderosos. Sólo es necesario tachar una boleta electoral y ¡zaz!, el país se transforma, proliferan las pistas de hielo y las playas artificiales, las carreras de autos en Reforma, los periféricos con segundo piso incluido y las construcciones del bicentenario (¿ha notado usted que no se habla del centenario?). Vaya, ni siquiera es necesario vigilar la elección para que no se convierta en un fraude y en una película documentándola.

La sumisión con que esto fue adquirido, digerido y difundido por buena parte de la intelectualidad progresista de México no debiera extrañar, sobre todo si se toma en cuenta que lo otro, pensar, analizar, debatir y criticar, cuesta más, es decir, es más caro.

Lo que sorprende es la virulencia y ruindad con la que atacaron y atacan a quien no se traga esa galleta dietética, perdón, esa rueda de molino.

Les doy otro ejemplo:

En la Ciudad de México se ha realizado un despojo impecable y ha obtenido el apoyo y/o el silencio cómplice de esa intelectualidad.

Un gobierno de “izquierda moderna” ha conseguido lo que la derecha no había podido: despojar a la ciudad y al país del Zócalo.

Sin necesidad de leyes reguladoras de marchas y mítines, sin necesidad de las firmas que los panistas hubieron de falsificar, el gobierno de Marcelo Ebrard toma el Zócalo, lo entrega a empresas comerciales (por ahí leímos que era de alabar que no le hubiera costado nada al gobierno del DF y que todo hubiera sido costeado por empresas privadas que, por cierto, incluyen a una de las televisoras “vetadas” por el lopezobradorismo), se construye una pista de hielo y ¡zaz!, cuando menos durante dos meses, nada de mítines o manifestaciones en esa plaza que el movimiento estudiantil de 1968 arrancó a las celebraciones oficiales.

No más CND-lópezobradorista, no más invasiones de turbas a la catedral, nada de gritos que no sean los de quienes se caen, nada de mítines ni marchas, no más gritos, pancartas, indignación.

Para los 10 meses restantes del año, el “izquierdoso” Ebrard ya tiene pensados nuevos proyectos que hagan sentir a los capitalinos que están en alguna otra metrópoli muy “chic”.

Hace apenas unos días, el llamado FNCR descubrió que la marcha que había convocado para el Zócalo no podría realizarse porque la pista de hielo lo ocupaba.

No protestaron contra ese despojo, simplemente cambiaron de lugar. Después de todo, no había por qué interferir en el espíritu neoyorkino que ahora se respira en el DF… ni en las ventas de patines de hielo en los grandes centros comerciales.

No sólo no se impidió el despojo, no sólo no se criticó, además se aplaudió y celebró con fotos a color en primera plana, crónicas y entrevistas, este evento “histórico” que le ahorró a los defeños las largas colas para obtener la visa norteamericana, y el costo del transporte y el hospedaje en la Nueva York de las películas que ven Marcelo Ebrard y su aspirante a Cristina Kirchner autóctona.

Si esto recuerda el método de “pan y circo” tan caro a los gobiernos priístas, se olvida que sigue faltando el alimento, porque el único PAN que hay es el partido que ahora se amarra a la caída de Calderón Hinojosa, con el que toda la clase política se relaciona en privado y se deslinda en público.

Todo eso se pasa y se celebra porque el señor Ebrard no se ha tomado (todavía) la foto con Felipe Calderón y porque dice que es de izquierda… aunque gobierne como de derecha, con desalojos y despojos disfrazados de espectáculo y orden.

¿Y estos intelectuales de izquierda?

Bueno, pues aplausos para el desalojo de los barrios (con acusaciones de narcotráfico que nunca fueron probadas), más aplausos para el desalojo del comercio ambulante en el centro histórico (para acabar de entregarlo a la iniciativa privada), más aplausos a las edecanes en la carrera de autos en la avenida Reforma…

/¡Qué cambio, mi buen!, de las carpas “all included” [todo incluido] del plantón contra el fraude, al glamur de la velocidad en un deporte tan de masas, tan popular y tan sin patrocinio como es el de las carreras de autos; del “grito de los libres” contra el espurio, a aspirar a ser subsede de la olimpiada de invierno; ¡no, mi buen! ¡no importa si eso no es de izquierda, pero de que apantalla, apantalla!; mire, estos patines los tengo en varias combinaciones: tricolores para los nostálgicos, azules para los persignados, y amarillo con negro para los ingenuos; hay también con los colores de la chiquillada, digo, de lo perdido lo que aparezca, ¿no cree? Ahora que, eso sí, el patinaje sobre hielo es para gente esbelta, así que le incluyo estas galletas que lo dejan más delgado que con un apretujón en el metro en hora pico. ¿Qué? ¿Es usted skater? ¿No le digo? Por eso este país no progresa, donde quiera abunda la gente sucia, fea, mala y, para acabarla de amolar, naca. Órale, siquiera deme lo del fondo de desempleo y no le digo a nadie… /

Frente al desalojo de familias en el barrio bravo de Tepito, el silencio o el razonamiento frívolo y servil: “se está combatiendo a la delincuencia”, señaló un intelectual y fallido suspirante a la rectoría de la UNAM, y una foto en primera plana mostraba a una niña sentada sobre los pocos muebles que su familia rescató de uno de los desalojos. La filosofía Rudolph Giulianni, importada de Nueva York (como la pista de hielo) por López Obrador con la coartada de “primero los pobres”, ahora hecha argumentación intelectual: esa niña era una narcotraficante en potencia… ahora es… nadie.

Ya no se quiere ocultar que la llamada izquierda institucional no es de izquierda, ahora se presenta como una virtud, de la misma forma que se anuncia un café descafeinado con la virtud de que no desvela y no sabe a café.

Es esta izquierda a la que algunos intelectuales progresistas (lo que sea de cada quien, los hombres son ahí la mayoría) presentan como el único referente aceptable, maduro, responsable, deseable y posible para la transformación social.

Sin embargo, y afortunadamente, no todo el pensamiento progresista es “bien portado”.

Algunos hombres y mujeres han hecho del pensamiento analítico y reflexivo, palabra incómoda y a contrapelo. En estos días podremos escuchar a algunas de estas pensadoras y pensadores. No están todos los que son, ni son todos los que están, pero el saber de su navegar río arriba en el cauce del conocimiento, es un alivio para quienes a veces imaginamos que no estamos solos.

Por eso saludo en esta primera ronda a Immanuel Wallerstein y a Carlos Aguirre Rojas.

Reflexionando sobre algo del trabajo teórico de ellos, presentamos…

ALGUNAS TESIS SOBRE LA LUCHA ANTISISTÉMICA

UNO.- No se puede entender y explicar el sistema capitalista sin el concepto de guerra. Su supervivencia y su crecimiento dependen primordialmente de la guerra y de todo lo que a ella se asocia e implica. Por medio de ella y en ella, el capitalismo despoja, explota, reprime y discrimina. En la etapa de globalización neoliberal, el capitalismo hace la guerra a la humanidad entera.

DOS.- Para aumentar sus ganancias, los capitalistas no sólo recurren a la reducción de costos de producción o al aumento de precios de venta de las mercancías. Esto es cierto, pero incompleto. Hay cuando menos tres formas más: una es el aumento de la productividad; otra es la producción de nuevas mercancías; una más es la apertura de nuevos mercados.

TRES.- La producción de nuevas mercancías y la apertura de nuevos mercados se consiguen ahora con la conquista y reconquista de territorios y espacios sociales que antes no tenían interés para el capital. Conocimientos ancestrales y códigos genéticos, además de recursos naturales como el agua, los bosques y el aire son ahora mercancías con mercados abiertos o por crear. Quienes se encuentra en los espacios y territorios con estas y otras mercancías, son, quiéranlo o no, enemigos del capital.

CUATRO.- El Capitalismo no tiene como destino inevitable su autodestrucción, a menos que incluya al mundo entero. Las versiones apocalípticas sobre que el sistema colapsará por sí mismo son erróneas. Como indígenas llevamos varios siglos escuchando profecías en ese sentido.

CINCO.- La destrucción del sistema capitalista sólo se realizará si uno o muchos movimientos lo enfrentan y derrotan en su núcleo central, es decir, en la propiedad privada de los medios de producción y de cambio

SEIS.- Las transformaciones reales de una sociedad, es decir, de las relaciones sociales en un momento histórico, como bien lo señala Wallerstein en algunos de sus textos, son las que van dirigidas contra el sistema en su conjunto. Actualmente no son posibles los parches o las reformas. En cambio son posibles y necesarios los movimientos antisistémicos.

SIETE.- Las grandes transformaciones no empiezan arriba ni con hechos monumentales y épicos, sino con movimientos pequeños en su forma y que aparecen como irrelevantes para el político y el analista de arriba. La historia no se transforma a partir de plazas llenas o muchedumbres indignadas sino, como lo señala Carlos Aguirre Rojas, a partir de la conciencia organizada de grupos y colectivos que se conocen y reconocen mutuamente, abajo y a la izquierda, y construyen otra política.

Habría, creemos nosotros, nosotras, que desalambrar la teoría, y hacerlo con la práctica. Pero eso tal vez lo pueda explicar mejor Don Daniel Viglietti esta noche, cuando asuma la parte de culpa que tiene de que yo esté detrás de este pasamontañas, en lugar de estar detrás de una guitarra intentando el ritmo corrido-cumbi-ranchera-norteña.

Así las cosas, creo que siempre sí. Daniel Viglietti cantará esta noche, así que habrá música y baile.

Tal vez lleguen también, en estos días, Elías Contreras, la Magdalena, Sombra, Diciembre y las mujeres zapatistas.

Y tal vez Andrés Aubry sonría viendo y escuchando todo, contento de no estar en esta mesa donde nunca acababa de decir lo que tenía que decirnos, porque se le iba la vida agradeciendo e, invariablemente, a mitad de su ponencia le pasaban el papelito de “tiempo”.

Así que, antes de que me lo pasen a mí, gracias, nos vemos en la tarde.

Subcomandante Marcos.
San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México.

¿Qué falta en las negociaciones sobre el clima? ¡Justicia!

Muchos movimientos sociales y grupos reunidos en Bali han acordado crear una plataforma llamada Climate Justice Now! con el objetivo de intensificar las actividades para evitar y afrontar el cambio climático.

COMUNICADO DE PRENSA

BALI (INDONESIA), 14 de diciembre de 2007 – Durante la Conferencia sobre el Clima de la ONU, activistas de organizaciones y movimientos sociales de todo el mundo llevaron la lucha por la justicia social, ecológica y de género a las salas de negociaciones y a las calles de Bali. [1]

Tanto dentro como fuera del centro de convenciones, los activistas reivindicaron políticas y prácticas que protejan los medios de vida y el entorno.

En decenas de actos paralelos, informes, protestas espontáneas y ruedas de prensa se han presentado las falsas soluciones al cambio climático –como la compensación de emisiones, el comercio de emisiones para los bosques, los agrocombustibles, la liberalización comercial y la privatización–, defendidas por gobiernos, organismos financieros y empresas multinacionales.

Las comunidades afectadas, pueblos indígenas, mujeres y campesinos exigieron soluciones reales a la crisis climática, soluciones que no han captado la atención de los dirigentes políticos. Entre estas verdaderas soluciones, cabe destacar:

* reducción del consumo.
* importantes transferencias económicas del Norte al Sur –por su responsabilidad histórica y deuda ecológica– para pagar los costes de adaptación y mitigación, desviando presupuestos militares, con nuevos impuestos y con la cancelación de la deuda.
* dejar los combustibles fósiles bajo tierra e invertir en la eficiencia energética y en energías renovables, seguras, limpias y dirigidas por las comunidades.
* una conservación de los recursos que se base en derechos y que haga valer los derechos territoriales indígenas y promueva la soberanía popular sobre la energía, los bosques, la tierra y el agua.
* agricultura familiar sostenible y soberanía alimentaria de los pueblos.

En las negociaciones, los países ricos e industrializados han ejercido una presión injustificable sobre los gobiernos del Sur para que se comprometan a reducir sus emisiones. Al mismo tiempo, se han negado a cumplir con sus obligaciones legales y morales de reducir drásticamente las emisiones y respaldar las iniciativas de los países en desarrollo para reducir las emisiones y adaptarse a los impactos climáticos. De nuevo, se está obligando a la mayoría del mundo a pagar por los excesos de la minoría.

Comparado con los resultados de las negociaciones oficiales, el principal éxito de Bali está en el impulso que se ha generado en torno al movimiento mundial por la justicia climática.

Y seguiremos con nuestra lucha no sólo en las negociaciones, sino también sobre el terreno y en las calles: ¡justicia climática ya!

Notas

[1] Muchos movimientos sociales y grupos reunidos en Bali han acordado crear una plataforma llamada Climate Justice Now! con el objetivo de mejorar el intercambio de información y la cooperación entre ellos y con otros grupos, e intensificar así las actividades para evitar y afrontar el cambio climático. La justicia es un factor esencial de la lucha contra el cambio climático, y no se debe sacrificar bajo ningún concepto.

La plataforma está integrada, entre otros, por: Carbon Trade Watch, Transnational Institute; Center for Environmental Concerns; Focus on the Global South; Freedom from Debt Coalition, Philippines; Amigos de la Tierra Internacional; Gendercc - Women for Climate Justice, Global Forest Coalition; Global Justice Ecology Project; International Forum on Globalization; Kalikasan-Peoples Network for the Environment (Kalikasan-PNE); La Vía Campesina; miembros de Durban Group for Climate Justice; Oilwatch; Pacific Indigenous Peoples Environment Coalition, Aotearoa/New Zealand; Sustainable Energy and Economy Network; The Indigenous Environmental Network; Third World Network; WALHI/ Friends of the Earth Indonesia; Movimiento Mundial por los Bosques Tropicales.

www.tni.org

Conexión con Kosovo: un conflicto en el seno de Europa.

Kosovo es una región de los Balcanes que partenece al estado Serbio. Sin embargo, su población es al 90% de origen albanés. Actualmente, se encuentra bajo un protectorado de Naciones Unidas y el pasado lunes se acabò el tiempo para las negociaciones. Los intermediarios internacionales constataron su fracaso antes la imposibilidad de coinciliar las posiciones de las dos partes. Por un lado, Pristina pide la independencia, por el otro Belgrado está dispuesto a conceder máxima autonomía, pero no a perder soberanía sobre el Estado. En las próximas semanas se espera una declaración unilateral de independencia por parte de Kosovo que contará con el apoyo de Estados Unidos y de casi toda la Unión Europea. Sin embargo, Rusia ya ha dicho que se va a oponer a la independencia. De todas formas la Unión Europea, en la que quiere entrar Serbia, así como Kosovo, va a tener un papel estabilizador muy importante. De todo esto hemos hablado con Emanuele Valenti, enviado especial en Kosovo de la emisora italiana Radio Popolare (AUDIO)

www.masvoces.org

La extrema derecha se organiza electoralmente.

La ultraderecha española se está reorganizando. El objetivo: conseguir resultados electorales significativos. Pero sus diferentes intentos organizativos chocan con su tradicional fragmentación.

Tras la autodisolución de Fuerza Nueva, a raíz de su estrepitoso fracaso electoral en 1982, la ultraderecha española no ha tenido ni un partido ni un líder que consiga aglutinar el voto ultra. Caracterizada por constantes enfrentamientos entre grupos y monumentales broncas entre sus líderes, la extrema derecha española mira con envidia los resultados de sus amigos del Frente Nacional francés y el liderazgo aglutinador de Jean Marie Le Pen. Sin embargo las diferencias persisten y en la apuesta por la vía electoral ya se perfilan varias corrientes claramente enfrentadas.

Manuel Canduela, líder de Democracia Nacional (DN), aglutina los residuos neofascistas más violentos y extremistas. En su órbita pululan otros grupos más minoritarios, como Alianza Nacional (AN), directamente vinculada al terrorismo ultra, o Combat España, una coordinadora de neonazis extremadamente violentos. Desde la llegada de Canduela a la dirección de DN, hace cuatro años, el partido que naciera como un intento de imitar los pasos de Le Pen, ha degenerado en un grupo filonazi.

Canduela, condenado por asociación ilícita, ve ahora con cierto vértigo el panorama que se presenta a raíz del asesinato en Madrid del joven antifascista Carlos Javier Palomino a manos de un soldado de extrema derecha simpatizante de su partido.

El máximo enemigo y competidor de Canduela, José Luís Roberto, líder de España 2000 (E 2000), tardó pocas horas en condenar el asesinato del joven antifascista refiriéndose a la culpabilidad de “quien ha convocado irresponsablemente una manifestación”, en clara alusión al presidente de DN.

España 2000

Y es que E 2000 “ha adquirido una vida y un rumbo propio que la han alejado progresivamente de la extrema derecha”, según una declaración publicada tras las elecciones municipales del pasado 27 de mayo. Elecciones en las que el partido de Roberto subió en votos y obtuvo representación en dos localidades valencianas de más de 15.000 habitantes. El citado documento, cuya autoría se atribuye al recién llegado Ernesto Milá, anuncia la nueva estrategia de los ultras. Esta vía lepenista pretende aglutinar a la Plataforma per Catalunya (PxC), que cuenta con 18 concejales, y a Iniciativa Habitable (IH), una candidatura ultra disfrazada de ecologista liderada por el ex falangista Manuel Leal Gil. Para ello pretenden, a imagen del FN francés, introducir su discurso fácil y populista contra la inmigración en las clases trabajadoras, especialmente en los cinturones industriales de las grandes ciudades. La estrategia es simple: adaptar su discurso a los nuevos tiempos, ganar presencia institucional y visibilidad mediática y convertir a los inmigrantes en auténticas bestias negras. En el País Valenciano y Cataluña, el discurso de los ultras se aleja -aunque sin abandonarlo ni mucho menos- del anticatalanismo y del españolismo a ultranza y abandera la islamofobia. Es el caso de las campañas del líder de PxC, ex miembro de Fuerza Nueva en Cataluña, contra las mezquitas. En Valencia el partido de Roberto suele organizar manifestaciones legales contra la inmigración y partidos de fútbol “sólo para españoles” en barrios de fuerte presencia extranjera caracterizados por una convivencia pacífica.

La llegada a E 2000, el pasado enero, de Ernesto Milá ha consolidado esta vía. Su alianza con José Luís Roberto tiene un claro objetivo: articular la representación de las tres formaciones -IH, PxC y E 2000 suman en total 30 concejales- y conseguir una candidatura unitaria para las elecciones al Parlamento Europeo. Pero el camino hacia la unidad está lleno de obstáculos. Uno de ellos es Madrid, donde Roberto y los suyos no tienen tanta influencia. En la capital española hay, además, competidores.

Cabe recordar que la nueva marca electoral del tradicionalismo español, el Frente Nacional, se presentaba en una manifestación el 28 de octubre secundada, según sus organizadores, por 5.000 personas. Su presidente, el falangista José Fernando Cantalapiedra, se postuló en una escenografía cuidada y moderna como el líder de la “nueva España”. Madrid es también el campo de batalla que se disputan DN y el FN, ya que en varias ocasiones han puesto a prueba sus capacidades de convocatoria con actos simultáneos. Por ejemplo, el 11 de noviembre convocaron separadamente marchas contra la llegada masiva de inmigrantes extracomunitarios. Una por el barrio de Salamanca, organizada por el FN; la otra, de DN, en Usera, cerca de donde moría Carlos.

El asesinato del joven antifascista hizo saltar todas las alarmas entre los ultras lepenistas. Las demandas de ilegalización de las organizaciones fascistas desde amplios sectores sociales y políticos -incluyendo al Partido Popular- pueden empañar los planes de la nueva ultraderecha española. La rápida condena por parte de Roberto del asesinato pretende distanciarle de las agresiones fascistas pero su impresionante historial y el de los suyos le delata. La nada discreta actividad de los fascistas que apadrina incluye palizas, agresiones, amenazas y acumula numerosas denuncias. Además, su partido E 2000, pese a una imagen renovada y a un ideario “populista social y democrático” no logra convertirse en la “casa común del patriotismo”.

Sus conexiones policiales, así como sus actividades empresariales en la prostitución, hacen recelar de sus proyectos políticos a muchos ultraderechistas, especialmente al fundamentalismo católico, capitaneados por el Movimiento Católico Español y Alternativa Española, y al racismo sin tapujos de DN y AN. Roberto es el cerebro de ANELA, la patronal de la prostitución y se lucra con dicho negocio (ver DIAGONAL nº 47). El que nueve de cada diez trabajadoras de los clubs de ANELA sean extranjeras también irrita notablemente a sectores ultras. Además Roberto acoge en sus listas a propietarios de burdeles, lugares que se han convertido en auténticos centros culturales para los ultras valencianos. Y como líder tiene defectos: sus apariciones televisivas resultan desastrosas.

Por su parte, el FN francés reclama unidad a sus colegas pero al tiempo ha diversificado sus contactos. Pese a preferir a DN, casi todas las organizaciones ultras españolas participan en los encuentros del Frente Nacional francés. Alain Lavarde, el delegado de Le Pen en el Estado español, observa a sus camaradas desde su residencia en Benidorm. Antiguo capitán paracaidista del ejército francés en Argelia y ex miembro de la organización ultra OAS, Lavarde es fundamental para los proyectos electorales ultras: puede ser la llave del apadrinamiento político y económico del FN francés.

PANORAMA ULTRA

El cerebro

El proyecto de renovar el movimiento ultra español tiene, según diversas fuentes, como principal ideólogo a Ernesto Milá Rodríguez. Nacido en Barcelona hace 55 años, ha sido un activo dirigente de los grupos neofascistas españoles más violentos desde la Transición. Estrechamente vinculado al terrorismo fascista europeo de los ‘70 -era amigo íntimo del fascista italiano Stefano Della Chiae, implicado en numerosos atentados-, la Policía española lo consideró el ultra mejor relacionado con las tramas negras internacionales. En 1995 ingresa en la dirección de DN, pero unos años más tarde abandona la formación tras la llegada de Canduela. En enero de 2007 se integra en el partido España 2000, del que es responsable de prensa. Tras las elecciones municipales de mayo, a Milá se le atribuye la autoría de la declaración estratégica “Preparemos la respuesta identitaria del movimiento antiinmigración”.

Un barniz ecologista
Manuel Leal Gil, nacido en Madrid en 1968, es el fundador de la plataforma electoral Iniciativa Habitable/Madrid Habitable, de la que es el coordinador para todo el Estado. Pese a un nombre amable que suena a ecologista y un programa aparentemente de centroizquierda, es una plataforma xenófoba. Además, el pasado de Leal lo delata: número 12 en la candidatura de Falange Española por Madrid en 1996, candidato de España 2000 al Congreso por Madrid en 2000, posteriormente aparece en las listas del partido nazi Movimiento Social Republicano (MSR) en las municipales de 2003 y estatales de 2004. Su gran éxito, los diez regidores en Extremadura que Iniciativa Habitable conseguía en las elecciones municipales de 2007, con la alcaldía de Miramontes y sobre todo la misma representación que PSOE y PP -cinco concejales- en la localidad de Talayuela, tras liderar una campaña contra la construcción de una mezquita.

El tradicionalismo
La corriente quizá más dividida y esperpéntica del panorama ultra español es la que agrupa al tradicionalismo. Además de la avanzada edad de buena parte de sus bases, son crónicos sus enfrentamientos. Por ejemplo, hay cinco organizaciones que se reclaman falangistas. Sin embargo, algunos sectores del tradicionalismo pretenden renovar su discurso españolista incorporando el rechazo a la inmigración. Así, el presidente del Frente Nacional (FN), José Fernando Cantalapiedra, que recientemente ha abandonado La Falange, afirmaba en el acto de presentación de esta iniciativa electoral querer defender a “los trabajadores españoles frente a la inmigración”. La nueva marca electoral tradicionalista, que cuenta con el respaldo de Infonacional, portal ultra de referencia, pretende presentarse a las elecciones de marzo y a las europeas de 2009. Propone “cerrar las puertas a los inmigrantes no europeos”.

Hablando catalán

En estos momentos en Cataluña no nos interesa relacionarnos con todo lo franquista, la bandera española, el águila, que las llevamos en el corazón, pero políticamente no nos interesa”. Estas declaraciones de José Anglada Ruis emitidas hace unos años por un canal de televisión valenciano le retratan, porque aunque Anglada habla catalán habitualmente, tiene una larga militancia españolista. Líder de Fuerza Nueva en Cataluña, tras su disolución pasó por diversas organizaciones ultras hasta formar parte de la candidatura de la Agrupación de Electores Ruiz Mateos al Parlament de Catalunya en el ‘92. Heredero del discurso del Moviment Patriòtic Català y del grupo terrorista Milicia Catalana, que envolvía de catalanismo una realidad fascista y españolista, es el creador del partido ultra PxC. Afirma que “el Islam es un peligro. La gente de la calle está harta de la invasión”. En las pasadas municipales triplicó sus votos en Cataluña.

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CGT ante el Tratado de la Unión.

El nuevo Tratado de la Unión es una Reforma del actualmente en vigor y aún es más antidemocrático en su gestación que el Proyecto de Constitución Europea, el cual, al menos tuvo la posibilidad de ser discutido y validado por los ciudadanos de algunos países, por medio de referendos.

La UE, sus jefes de estado, su Comisión, han entendido que contar –aunque sea de forma muy limitada y controlada- con los ciudadanos tiene el riesgo de que éstos entiendan que el orden social que se constituye, nada tiene que ver con unas relaciones sociales basadas en el respeto de los derechos para todas las personas que habitan o trabajan en el espacio denominado UE.

El nuevo Tratado profundiza en la liberalización de todos los mercados de producción y de servicios y posibilita la aplicación práctica de la Directiva Bolkestein, siguiendo abierta la puerta a la privatización total de la sanidad, la educación, el agua y las pensiones.

Este Tratado cierra las estrategias Empresariales, fijadas en Lisboa 2000, basadas en la competitividad en un mundo cada vez más global y reafirmadas dichas estrategias por los Sindicatos CES (Confederación Europea de Sindicatos), en el programa de trabajo conjunto 2006-2008.

Estrategias que hacen desaparecer en la retórica y en la materialidad, los servicios públicos: sanidad, pensiones, ferrocarriles, educación, agua, vivienda, etc. e introduciendo el mercado de por medio tanto en su concepción, “servicios de interés general” como en su resolución (quien ahorre, tendrá una sanidad privada, una pensión complementaria, etc.).

El mercado como principio rector de la política, manifestada la misma en términos de relaciones económicas (la libre competencia y la libre circulación del dinero, como derechos intocables), en relaciones comerciales (protección de multinacionales en sus intercambios desiguales e injustos con otros países) y la apuesta decidida por las dinámicas de creciente financiarización de la sociedad en su conjunto.

Las políticas sociales, gasto público en prestaciones y coberturas sociales: pensiones, sanidad, dependencias, educación, vivienda, transportes públicos y modelos de movilidad, al igual que la fiscalidad, siguen sometidas al veto, haciendo imposible una política comunitaria al respecto, al tiempo que se permiten los paraísos fiscales dentro de la propia Unión.

Si la libre competencia (competitividad) es el principio rector, los mercados de trabajo y las políticas de empleo sólo pueden regirse por la regla de la desregulación laboral (flexibilización) y la precariedad integral de la fuerza de trabajo (vaciamiento de derechos laborales y sociales).

La Comisión adquiere el “poder absoluto” a través de las adecuadas políticas internas, directivas fundamentalmente, para garantizar “a las empresas europeas competitivas, acceso a los mercados mundiales y operar en ellos con seguridad” (Meter Mandelson-Comisario de Comercio).

Al igual que las necesidades sobre la mano de obra extra-comunitaria, de la Europa que “envejece”, son tratadas desde la lógica del mercado y la doble moral, por una parte políticas desregulación de una mano de obra necesaria y suficiente para garantizar el tipo de trabajo precario de que requiere la competitividad y por otra, políticas de negación de derechos de ciudadanía que, desde la represión y control, permanenticen las relaciones desiguales, injustas y neo-coloniales de las relaciones Norte Sur y, sobre todo, el área de influencia euro-mediterránea.

El empeoramiento con respecto a lo que hubiera sido un Tratado en toda regla, revestido de “Constitución Europea”, se encuentra en algo que en su momento fue “vendido” a la ciudadanía como el mantenimiento de un modelo diferenciador de Europa con respecto a EEUU, es decir su Estado de Bienestar o social de mercado, condensado en la Carta de Derechos Fundamentales, aparece con serias dudas jurídicas, más allá de no recoger de forma vinculante los derechos sociales.

Gabinete de Estudios Confederales CGT
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