El Ayuntamiento de Sevilla ha firmado un acuerdo con Indra para instalar un sistema de videovigilancia urbana en los 6 "centros comerciales abiertos" y 12 polígonos industriales de Sevilla. Se da la circunstancia de que Indra es la principal empresa armamentística del Estado español, responsable de buena parte del proyecto del SIVE (frontera electrónica) en el Estrecho, que ahora traslada sus tecnologías militares al control urbano.También es de interés que vaya a ser Indra (www.indra.es), la empresa militar, la encargada de hacer el diagnóstico sobre seguridad urbana (y libertades), así como que sea Jon Ander Sánchez (IU) el firmante del encargo.
Esta noticia debe sin duda relacionarse con el anuncio de la UE de establecer un sistema de control biométrico (reconocimiento de iris y fisonomías) para todxs los que atraviesen las fronteras, así como un nuevo DNI digital y una nueva presentación del sistema e identificación de las tarjetas de crédito con huella dactilar.
Sería importante, desarrollar un movimiento de análisis del siginficado de todas estas medidas y de la oposición crítica a las mismas.
Noticia en Europa Press:
El Ayuntamiento de Sevilla, por mediación de su delegación de Economía y Empleo, ha firmado hoy un convenio con la empresa especializada Indra para llevar a cabo un estudio, que según las estimaciones iniciales estará listo antes del verano, con la finalidad de determinar en qué lugares concretos de los polígonos industriales y de seis zonas comerciales de la capital hispalense podrán instalarse videocámaras de vigilancia y seguridad.
En rueda de prensa, el delegado municipal de Economía y Empleo, Jon Ander Sánchez (IU), que compareció acompañado del director general de Indra, Santiago Roura, y el responsable de Sistemas de Seguridad de la empresa, José Manuel Pérez-Pujanzón, señaló que, asimismo, en el acuerdo se contempla facilitar la implantación de tecnologías de la información entre los participantes en los proyectos de la incubadora CREA.
"Se hará un diagnóstico, técnicamente impecable, no sólo de los lugares de implantación de las cámaras sino de los sistemas de seguridad viables", expuso Sánchez, que indicó que con este convenio, sin contraprestación alguna por parte municipal en lo que al estudio se refiere, se pretende afrontar con "seriedad y rigor" un tema "en el que se llevan muchos años mareando la perdiz".
Por su parte, Pérez-Pujanzón apuntó que el plazo ofrecido para que el análisis esté preparado antes de verano obedece a que, según la experiencia, el estudio de las necesidades de seguridad en un polígono industrial tiene "razonablemente" establecido su periodo de duración en unos 40 días, mientras que en centros comerciales abiertos "depende de la complejidad de la ciudad y de otros factores como las interacciones o las limitaciones legales".
En concreto, las videocámaras se instalarían en todos los polígonos industriales de la ciudad —Carretera Amarilla, El Pino, Calonge, Store, Aeropuerto, La Chaparrilla, Navisa, El Refugio, San Jerónimo, Su Eminencia, Pineda y Tablada—, así como en las zonas comerciales del centro, Asunción-Los Remedios, Plaza de la Toná y avenida Pedro Romero —ambas en el Polígono San Pablo—, Luis Montoto y Marqués de Pickman-Gran Plaza. Estos lugares son los que se trabajaría en un principio, si bien el Consistorio no descarta ampliar la nómina caso de que fuera necesario.
Tecnologías de nueva aplicación
El director de Sistemas de Seguridad de Indra expuso que las videocámaras contarían con nuevas tecnologías —de aplicación activa pionera en 2007 y "no muy costosas"— que permitirían que estos elementos fuesen elementos de vigilancia activa, y no sólo persuasivos, según el modelo ya instalado en algunos lugares de Madrid como la Plaza Mayor o la calle Montera.
Así, y frente a la "fatiga" del ojo humano que vigila una veintena de monitores, Pérez-Pujanzón incidió en aspectos de alerta tales como el cruzar líneas que no se deben cruzar, tráfico de personas en direcciones que no deberían ser esas, objetos abandonados o, incluso, la superposición de una imagen real con otra sintética para poder observar mejor lo que sucede.
Sobre los problemas legales que en aras de la Ley de Protección de Datos y una supuesta vulneración del derecho a la intimidad pudieran derivarse de la utilización de estos mecanismos, el delegado municipal de Economía y Empleo no ocultó que se trata de un tema "complejo", con repercusiones jurídicas "ya conocidas", por el que ya ha habido contactos con Subdelegación de Gobierno y la Delegación municipal de Convivencia y Seguridad. No obstante, desde Indra se asegura que una parte de la consultoría consiste en dar las "garantías técnicas" para que no se incurra en este tipo de situaciones.
Asimismo, Sánchez se refirió a la Confederación Provincial de Comerciantes de Sevilla (Aprocom), entidad que ha solicitado al Ayuntamiento en reiteradas ocasiones la puesta en marcha del proyecto, señalando que el proyecto tendrá que ser cofinanciado, aspecto cuyo acuerdo será definitivo para fijar una fecha en la que el sistema de vigilancia pueda estar listo.
El alcalde pide "consenso" y "participación" del comercio. Por su parte, el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE), también se pronunció hoy sobre el particular, indicando a los periodistas tras la inauguración de una exposición sobre el flujo migratorio en la provincia que se trata de una medida de seguridad que "cada vez se extiende más", pero que debe contar con la "participación directa de los afectados".
Al respecto, el primer edil dijo que ha pedido que todo se lleve a cabo con el "consenso" de los sectores del comercio, que son quienes lo plantean. Sobre la situación de los comerciantes del centro que también han solicitado cámaras de vigilancia, el alcalde aclaró que "daremos solución a las propuestas que nos llegan, pero siempre de manera consensuada, por lo que si no se ponen de acuerdo no se llevará a cabo".
lahaine.org
0 comentarios:
Publicar un comentario